16/1/18: El dramaturgo Albert Boadella se ha presentado como presidente imaginario en el exilio del gobierno de Tabarnia, un territorio inventado de Barcelona y parte de Tarragona que ironiza para criticar el independentismo.

"Ciudadanos de Tabarnia, no estoy aquí". Así ha comenzado Albert Boadella su discurso como presidente de Tabarnia en el exilio. Vía Skype y con las banderas de la Unión Europea, España y Tabarnia a la espalda, el actor y director teatral se ha erigido como presidente imaginario parafraseando a su manera al expresidente Josep Tarradellas.

Boadella, que hace años que no pisa su tierra, Cataluña, ha culpado de esta situación a los "usurpadores de sentimientos, dinero, instituciones, clubes y banderas que han hecho irrespirable este territorio para los amantes de la libertad y el bueno humor". Explica que no puede ir a Tabarnia (ni al resto de Cataluña) porque "se llenó de rufianes que los han trinchado todo" y a los que no les importa "llevarnos a la ruina más absoluta".
"Han dividido Cataluña, España y, si pueden, Europa", ha denunciado Boadella que, con sorna, ha afirmado que para frenar esta situación han surgido "unos anticuerpos capaces de reaccionar ante la epidemia: los ciudadanos de Tabarnia", para hacer frente a una situación en la que "se han roto familias, amistades y negocios". En este punto, Boadella ha hablado del "renacimiento del sentido común" y del hartazgo de los tabarneses. "Han dicho ¡basta! a tantos capullos disfrazados de 'segadors', a envenenar la cabeza de los niños y ¡basta! a incitar el odio hacia el vecino del rellano".
A través de un plasma, Boadella abre las puertas de Tabarnia a todo el mundo. "Aquí queremos reírnos con libertad, de todo y de todos, sin ser perseguidos como traidores". En el ámbito económico, promete "hacer buenos negocios sin mordidas institucionales" y tiende la mano a todos aquellos que quieran formar parte de este pueblo. "Aquí cabe a todo el mundo. Nos apretaremos un poco si hace falta", ha afirmado. Eso sí, pide no ir con tractores "porque no cabremos".
Y lanza un clarísimo mensaje a los independentistas. "Soy un payaso, pero a su lado soy un modesto aprendiz. Porque, por mucho que he hecho, esforzado y trabajado, nunca he conseguido superarles". De esta manera, Boadella responde a todos aquellos que durante años le han criticado e, incluso, boicoteado sus obras teatrales en Cataluña hasta que decidió no volver más. "Sus golferías son espectaculares, han hecho del Parlament un auténtico Teatro Nacional de Cataluña", ha dicho desde su atril de presidente reconociéndoles que "como expertos en el engaño con dinero público, la verdad es que no tienen competencia posible".
Con tono presidencial, Boadella les manda una seria advertencia: "Señores trinchadores y rufianes, sus bufonadas con nuestro dinero se han acabado". Y es que si siguen en el 'procés', la respuesta de Tabarnia no será otra que... un corte de mangas y "butifarra a la Cataluña que nos quieren imponer".
"¡Viva Tabarnia, que es lo mismo que decir viva España!", ha terminado el presidente de Tabarnia en el exilio, que no podrá atender a los medios de comunicación hasta el 13 de febrero porque está preparando una nueva obra de teatro.

22/3/18:  “Vamos a celebrar una conferencia al más bajo nivel entre yo, que soy presidente legítimo, y un presidente legítimo que es él”. Con esta declaración de intenciones, una furgoneta a modo de “embajada móvil” y una bata de doctor especialista en “paranoias regionales”, se ha plantado Albert Boadella ante la casa de Carles Puigdemont en Waterloo.
“Nuestros medios son más modestos”, explicaba Boadella junto a una tienda de campaña que la delegación de Tabarnia ha plantado ante la mansión de 4.000 euros al mes que se ha convertido en el epicentro del independentismo catalán en el exterior. Una sede pagada, dice el cómico, con el dinero público “de todos”.
“Carlitos, Carlitos, estamos aquí preparados ya (…) No te escondas, ya sabemos que eres un fuguista compulsivo, sabemos que estás tras las cortinas, ven aquí que te contaremos los desastres que has  organizados”, ha gritado Boadella, altavoz en mano. Tampoco ha faltado la música: como broche al acto, los representantes de Tabarnia han bailado al ritmo de la popular “Waterloo” de Abba.
Lo cierto es que Boadella y su séquito -Jaume Vives, Tomás Guash y varios simpatizantes- eran conscientes de que Puigdemont no se encontraba en Waterloo, sino Finlandia. Tanto como de que su sátira no es otra cosa que eso, un show. Una crítica descarriada al 'procés' con la que pretenden mostrar lo descabellado que, a su juicio, es el camino emprendido por los independentistas que pretenden seguir adelante con el 'procés' caiga quien caiga.
Boadella, que se reivindica como “payaso”, amenaza con denunciarles por “competencia desleal”. Aunque aparca el humor momentáneamente para hablar de su “parte trágica: las consecuencias directas sobre nuestro territorio”. “Si todo esto sucediera solo dentro del mundo de la farándula tendría su gracia, el problema son las consecuencias” sobre Cataluña, dice.
El cómico, que recuerda que dejó de actuar en Cataluña en 2006 después de que, dice, le señalaran como “traidor nacional”, no ha hecho las paces aún con la situación tierra que le vio nacer. “Volveré cuando cambie el régimen”, apunta. Y enumera, en la misma sala donde Puigdemont celebró su primera comparecencia tras su aparición sorpresa en Bélgica, las perversiones del independentismo.
“No es cierto que haya un pensamiento único”, “ha habido una tergiversación de la historia que ha calado en la mente de los nacionalistas”, hay una “inducción del odio hacia el conjunto de los españoles”, advierte Boadella. Tras su presentación ante los medios, todos españoles, los auto-proclamados representantes de Tabarnia se han dirigido a un acto en la Eurocámara, de la mano del eurodiputado Enrique Calvet.
(El Confidencial)

De izqda. a dcha., Jaume Vives, Tomás Guasch, Albert Boadella y Miguel Martínez.

31/3/18: Dues-centes persones, segons els Mossos d'Esquadra, s'han concentrat aquest matí a la plaça Major de Jafre (Girona), que conta amb 393 habitants, en la convocatòria del Grup de Periodistes Pi i Maragall i secundada per la plataforma Tabàrnia per donar suport a Albert Boadella, després que recentment aparegués una pintada en el municipi que deia: "Boadella fot el camp".La plataforma Tabàrnia va cridar la concentració "per la llibertat d'expressió" i va demanar als que assistissin que no portessin banderes ni distintius polítics. La manifestació ha avançat encapçalada per una pancarta decorada amb màscares blanques amb la boca tapada per una línia vermella i signada pel grup de periodistes convocant. Al costat de Boadella, s'han sumat a la convocatòria el periodista Arcadi Espasa, l'exdiputat de Ciudatadans Jordi Cañas i el portaveu de la plataforma Tabàrnia Jaume Vives, entre d'altres.

Un grup identificat com a 'Tabàrnia Lliure' s'ha emportat la placa simbòlica de plaça de l'1 d'Octubre de l'antiga plaça del Rei de Sant Cugat i que va penjar com a acció reivindicativa el Comitè de Defensa de la República. L'actuació de 'Tabàrnia Lliure', de la qual se n'ha fet ressò la plataforma oficial de Tabàrnia, és la resposta a la decisió de l'Ajuntament de canviar el nom de la plaça del Rei per plaça de l'1 d'Octubre.

'Tabàrnia Lliure' ha publicat una carta dirigida a l'alcaldessa de Sant Cugat i en què demana un rescat per la placa. El grup afirma que la placa és l'oficial penjada per l'Ajuntament, tot i que és una manualitat del CDR penjada fa setmanes, abans de decidir oficialment el canvi de nom de la plaça. "Ens ofeguen amb impostos de tot tipus per poder finançar plaques ridícules que es pengen als carrers públics i als edificis de les institucions que a tots ens haurien de representar", afirmen a la carta.

El grup es defineix com "una milícia armada amb bosses d'escombraries i tisores anti llaços grocs". "Si els regidors la volen recuperar hauran de pagar de la seva butxaca un impost contrarevolucionari de 155 euros", afegeixen. 'Tabàrnia Lliure' assegura patir "feixisme xenòfob" i "persecució per sentir-se tan català com espanyol".

Un dels impulsors de Tabàrnia, Jaume Vives, també ha comentat la situació a través de les xarxes socials.