JORDANIA - País NO APTO para personas con diversidad funcional

Capital: Amán

 Moneda: Dinar jordano

 El idioma oficial es el árabe, pero el inglés generalmente es hablado como segunda lengua por las clases comerciantes o miembros del gobierno.

 La religión oficial de Jordania es el islam con una mayoría de musulmanes sunitas islamismo suní (93,5%). El respeto a la religión es fundamental. Interrumpir a un musulmán que está rezando es una descortesía total.

Se estima que alrededor del 98% de la población jordana es de origen árabe y que aproximadamente el 92% practica el islamismo.

 La cultura jordana está ampliamente ligada con el Islam, el cual directa o indirectamente se encarga de regir determinadas costumbres y tradiciones. Asimismo, Jordania presenta una atrayente diversidad cultural, también marcada por la herencia de usanzas, creencias y valores tomados de la civilización chechena y de la armenia, entre otras.
**  Las mujeres de Jordania gozan de una elogiable libertad en el día a día: pueden estudiar, votar, conducir e incluso ocupar importantes puestos de trabajo.
 Dado que la monarquía es masivamente apoyada por el pueblo, lo mejor es evitar comentarios al respecto, sobre todo si incluyen críticas negativas.
Jordania es una monarquía constitucional en la que el rey (en estos momentos Abdalá II) ostenta amplios poderes ejecutivos y legislativos. Dado que la monarquía es masivamente apoyada por el pueblo, lo mejor es evitar comentarios al respecto, sobre todo si incluyen críticas negativas.

 COSTUMBRES

 - Al igual que en otros tantos países árabes, Jordania vive el Ramadán con el respeto y el significado que indican la historia y la cultura. Se trata de un mes sagrado en el que el ayuno es la base inamovible. A lo largo de Ramadán, que es el noveno mes en el calendario musulmán, está terminantemente prohibido comer, beber y fumar en las horas del día. Además, no se permite la venta de alcohol en ningún sitio. Casi todas las tiendas abren sus puertas más tarde de lo habitual y se les solicita a los turistas que respeten las reglas en público.

 - Después del Ramadán, llega el Eid al-Fitr, que radica básicamente en la celebración de la conclusión del Ramadán. Dura tres días y, en el primero, los jordanos se reúnen para orar y consumar el desayuno que precisamente le da cierre al mes de ayuno, tan significativo para los musulmanes. Una de las curiosidades de esta festividad es que los participantes visten prendas nuevas. Los hombres, puntualmente, usan ropa blanca como signo de integridad y pureza. Los integrantes de las familias se obsequian dulces entre sí y algunas personas todavía mantienen la tradición de entregarles regalos a los niños.

 - Parte esencial del Islam, el Mawlid (o Milad) consiste en la conmemoración del natalicio del Profeta Mahoma, fundador del Islam. El mismo se celebra durante el duodécimo día de Rabi‘ al-Awwal (Rabi I), tercer mes del calendario musulmán. Sacrificios de animales, procesiones populares, pláticas públicas y mucha -y variada- comida marcan la esencia de esta festividad sustancial en la cultura jordana.

 - Festividad trascendental en el almanaque islámico, Eid al-Adha también se conoce como Día de los Sacrificios o Celebración del Sacrificio. Se festeja la voluntad de Abraham para sacrificar a su hijo Ismael (algo que finalmente no sucede) como si se tratase de una acción de acatamiento a Dios, episodio documentado en la Biblia y en el Corán. Esta fiesta se lleva a cabo el décimo día de Du l-hiyya, duodécimo mes musulmán. El sacrificio animal (un cordero, generalmente) simboliza el agradecimiento a Dios por salvar la vida de Ismael, reemplazándolo justamente por un cordero cuando Abraham se disponía a ejecutar su sacrificio.

 - Tal como ocurre con la mayoría de las festividades cristianas en los países árabes, la Navidad en Jordania -lógicamente- no se vive con la misma pasión e intensidad que en el mundo occidental. 

 - En Jordania, el momento de tomar el té es realmente sagrado. Para los jordanos, la invitación a tomar el té es un gesto de hospitalidad. Este hábito le queda bien a cualquier instante del día, pero la sobremesa constituye una de las situaciones en la que el té no puede faltar para amenizar las conversaciones entre familiares y amigos. Algo similar sucede con el desayuno, siempre acompañándolo de dulces verdaderamente deliciosos.

* La mano izquierda se considera “sucia”, por lo que casi todas las acciones se realizan con la derecha. Algunos ejemplos: comer, saludar y entregar dinero.

* A mucha gente no le agrada ser fotografiada. Por ello, siempre es conveniente pedir permiso antes de tomar una imagen.

* Las expresiones de afecto (besos y abrazos) en público pueden ser mal vistas.

 

1. PETRA

  Petra es el tesoro más preciado de Jordania.

  Se trata de una enorme ciudad excavada por completo en las rocas hace más de 2.000 años por los nabateos, una tribu árabe muy trabajadora que convirtió esta zona en un importante enclave de la ruta de la seda y de las especias. 

2. WADI RUM

 Además de la reserva natural del mismo nombre, Wadi Rum es el hogar de comunidades de beduinos, algunas de las cuales todavía conservan sus tradiciones ancestrales.

 Se trata de un laberinto de paisajes de rocas monolíticas que se elevan hasta los 1.750 metros de altura en pleno desierto, creando un reto natural para los escaladores experimentados, y un escenario sobrenatural en el que vivir apasionantes experiencias en 4×4, sobre un camello o bajo las estrellas en tiendas de campaña beduinas, donde disfrutar de la comida tradicional al calor de la lumbre, amenizada con música tradicional árabe.
  En los años ochenta, una de las formaciones rocosas más espectaculares de Uadi Rum fue nombrada Los Siete Pilares de la Sabiduría.

 

3. AMMÁN

 No es una ciudad especialmente atractiva para el turismo (es moderna y funcional).

 En el centro comercial de la ciudad conviven edificios ultramodernos, hoteles, reconocidos restaurantes, galerías de arte y boutiques con cafeterías tradicionales y talleres de artesanía. Los barrios residenciales consisten principalmente en calles y avenidas perfectamente alineadas y flanqueadas por elegantes casas blancas, ya que una ley municipal establece el uso de la piedra local en las fachadas. El centro es mucho más antiguo y tradicional. Ahí se ubican los negocios más pequeños que producen y venden casi de todo, desde artículos de joyería hasta utensilios del hogar.

 Los habitantes de Amán son multiculturales, educados y hospitalarios.

4. ÁQABA

 Es la ciudad que Lawrence de Arabia tomó a los turcos tras su arriesgada travesía del desierto con los beduinos.
 Áqaba es una ciudad moderna y sin mayor atractivo arquitectónico.
 Áqaba es sobre todo un destino para buceadores, porque en sus escasos 27 kilómetros de costa esconde arrecifes de coral  bien conservados y llenos de vida. Las playas, la mayoría, son privadas.

5. LOS CASTILLOS DEL DESIERTO

 Al este del país se despliega un desierto pedregoso, monótono y plano en el que los diferentes gobernantes omeyas crearon fortalezas, casas de postas y fortines que defendían la ruta con Bagdad.  Algunos no son más que un puñado de muros de adobe semiderruidos; otros, como el Qusayr Amra, están declarados Patrimonio de la Humanidad. No es fácil llegar a ellos.

 6. JERASH

Jerash fue una de las ciudades grecorromanas más importantes de Oriente Medio. 
Sus ruinas están tan bien conservadas que permiten -sin echarle demasiada imaginación- sumergirse en una ciudad de hace 2.000 años. algunos de cuyos rincones parecen estar tal cual fueron en su época dorada. 

7. MAR MUERTO

  

  El mar está eso… muerto. Y sus riberas, también.
  El Mar Muerto está a unos 400 metros por debajo del nivel del mar, el lugar de menor altura de la Tierra.
  Sus aguas son hipersalinas. 
 La atracción principal del mar Muerto son sus cálidas y saladas aguas, increíblemente flotantes y ricas en minerales.
 Existen pocos placeres tan saludables como deleitarse con el lodo negro y estimulante del mar Muerto mirando al cielo.

 COMIDA

 Comer un segundo plato en el almuerzo o la cena es honrar a la ama de casa, así que no es necesario quedarse con las ganas de repetir; falta de respeto puede ser comer poco.

  Mansaf (elaborado con cordero, arroz y un yogur seco denominado jameed), el plato nacional de Jordania.

  Jameed es yogur seco elaborado con leche de cabra u oveja. El proceso de secado se hace con sal hasta que la crema se seca formando una bola de 20 a 30 centímetros de diámetro.